miércoles, 3 de septiembre de 2014

CADA FAMILIA TIENE UN ‘AURA’ DE BACTERIAS CARACTERÍSTICA

materia.com

Un estudio muestra que cuando una familia se muda de casa se lleva consigo un mundo propio e identificable de miles de especies de microbios, que influyen en su salud.



Mírese a sí mismo un instante. Eso que cree un cuerpo humano está, en realidad, mayoritariamente formado por otros seres vivos microscópicos, con sus propias preocupaciones e intereses. Por cada una de las células humanas que hay en su cuerpo, hay nueve bacterias. Técnicamente hablando, usted es 10% humano, 90% bacteria.
Pero, como señala el microbiólogo estadounidense Jack Gilbert, ese mundo paralelo invisible que marca nuestras vidas no acaba en uno mismo. Cada familia, y por tanto cada casa, tiene un aura de bacterias características. Gilbert, profesor de la Universidad de Chicago, capitanea el Proyecto Microbioma del Hogar, que explora cómo las personas interactúan con las bacterias que viven en sus casas.
El microbiólogo y su equipo han seguido durante seis semanas a siete familias, en los estados de California, Washington e Illinois. Cada dos días, los adultos participantes en el estudio —15, acompañados por tres niños, tres perros y un gato— cogían bastoncillos con algodón esterilizado y tomaban muestras del interior de su nariz, de sus manos y de sus talones. Además, pasaban estos hisopos por la manija de la entrada principal de su casa, por el pomo de la puerta del baño, por el suelo del dormitorio y por la encimera y el interruptor de la cocina.

Bacterias que engordan

La primera conclusión de su estudio, que se publica hoy en la revista Science, es que cada hogar tiene una fauna microscópica característica. Y, es más, cuando una familia se muda de casa, como hicieron tres de las participantes en el estudio, se llevan su personal aura de bacterias con ellas. En sólo un día, el nuevo hogar tiene la misma flora microbiana que el antiguo. Ahora, la gran pregunta es cómo influyen estas compañeras invisibles en la salud humana.
“Sabemos que ciertas bacterias pueden hacer que un ratón engorde de manera más sencilla, por ejemplo, y que otras tienen un papel en el desarrollo cerebral de los ratones jóvenes”, explica Gilbert en un comunicado. “Queremos saber de dónde vienen estas bacterias y, ya que la gente pasa cada vez más tiempo bajo techo, queríamos mapear los microbios que viven en nuestros hogares y la probabilidad de que se establezcan con nosotros”, expone. “Son esenciales para entender nuestra salud en el siglo XXI”.
El equipo de Gilbert ha observado que los miembros de un núcleo familiar tienen muchas más bacterias en común entre ellos que con las personas de otros hogares. Sus manos tienen una población microscópica muy similar y sólo el interior de sus narices muestra un mundo de bacterias más personal, propio de cada individuo.

Transmisión de enfermedades

En las más de 1.500 muestras recogidas, los científicos han identificado unas 22.000 especies diferentes de bacterias. ”Las especies más comunes que vemos son bacterias asociadas a la piel. El género Propionibacterium tiende a dominar todo”, detalla por correo electrónico Gilbert, cuya familia ha participado en el estudio.
“Pasamos el 90% de nuestras vidas bajo techo y de niños ese porcentaje puede ser incluso mayor. Este es nuestro ecosistema y adquirimos nuestras bacterias de este ecosistema. Si nos faltan algunas bacterias que pueden ser beneficiosas para nuestra salud, podemos sufrir impactos negativos. Por ejemplo, sabemos que la falta de algunas bacterias puede influir en nuestra propensión a desarrollar asma y alergias alimentarias. Si pudiéramos manipular la casa para tener más bacterias de este tipo, podríamos tratar estas enfermedades desde el nacimiento”, especula el microbiólogo.
En una de las familias investigadas, los científicos siguieron el rastro de una cepa potencialmente patógena del género Enterobacter. Primero apareció en las manos de una persona, luego en la encimera de la cocina y luego en las manos de otra persona, mostrando una posible cadena de transmisión de enfermedades dentro del hogar.
El aura de bacterias característica de una familia podría, además, servir como herramienta forense, en opinión de Gilbert. Con una muestra sin identificar de microbios del suelo de una de las casas del estudio, “se podría predecir fácilmente a qué familia pertenece”.

Noticia relacionada:

REFERENCIA

martes, 2 de septiembre de 2014

HALLAN UN GRABADO DE ORIGEN NEANDERTAL EN UNA CUEVA DE GIBRALTAR

agenciasinc.es

Una investigación internacional, liderada por la Universidad de Huelva, sobre un grabado descubierto en la roca de la Cueva de Gorham (Gibraltar) estima que la impresión de las líneas cruzadas que aparecen representadas fue probablemente trazada por neandertales. Esto supone que tendrían capacidad para la expresión abstracta.



Hasta ahora, el arte rupestre descubierto por los científicos se había atribuido exclusivamente a los seres humanos modernos, que llegaron a Europa occidental hace unos 40.000 años.
Un equipo internacional de científicos, liderado por la Universidad de Huelva, descubrieron un patrón abstracto grabado en una roca de la cueva de Gorham (Gibraltar).
Dicho patrón muestra líneas cruzadas y fue hallado en un sedimento intacto en el que previamente se habían encontrado artefactos neandertales, lo que sugiere que el labrado de la piedra es anterior a 39.000 años de antigüedad.
Los autores tomaron microfotografías de las marcas de herramientas en el grabado y las compararon con otras marcas experimentales realizadas con diversas herramientas.
Asimismo, el análisis geoquímico del revestimiento mineral en los surcos del tallado sugiere que este arte rupestre se creó antes de la deposición del sedimento suprayacente.
Las conclusiones del estudio que publica la revista PNAS indican que con alta probabilidad estos surcos se hicieron intencionadamente al pasar varias veces una punta de corte robusta sobre la roca, en una misma dirección, y no por el corte accidental relacionado con otras actividades.
“Los resultados se suman a la evidencias de otros yacimientos neandertales que demuestran que la capacidad intelectual de los neandertales ha sido subestimada”, apuntan los autores del estudio.
“A pesar de su aparente simplicidad, el grabado de los neandertales representa un salto cualitativo en nuestro conocimiento de la capacidad cognitiva de esos otros humanos ya extintos: este tipo de representaciones abstractas, sin ninguna funcionalidad aparente, es exclusivo de mentes con capacidad de abstracción”, como explica el investigador del CSIC Juan José Negro, de la Estación Biológica de Doñana, que ha participado en el estudio. “Se trata de un elemento cultural, de un fenómeno único equiparable a una obra de arte”, añade.

Referencia bibliográfica:

Joaquín Rodríguez-Vidal et al."A rock engraving made by Neanderthals in Gibraltar" PNAS: 1-6. 1 de septiembre. www.pnas.org/cgi/doi/10.1073/pnas.1411529111

lunes, 1 de septiembre de 2014

¿BOSTEZA UN LOBO SI VE HACERLO A OTRO DE SU MANADA?

noticiasdelaciencia,com

El fenómeno de que a una persona le entren ganas de bostezar si ve hacerlo a alguien con quien convive, es bien conocido, y se supone que es una señal inconsciente de empatía. En algunos otros animales, por ejemplo el perro, también sucede. ¿Ocurre lo mismo con el lobo?

Imagen A: El lobo situado a la derecha bostezó durante un período de descanso. Imagen B: Unos segundos más tarde, el lobo de la izquierda bostezó por contagio. (Fotos: Teresa Romero)


Aunque se asume que los bostezos “contagiosos” están relacionados con la capacidad humana de la empatía, hay pocas evidencias, aparte de las aportadas por estudios sobre primates, que conecten en otros animales dichos bostezos contagiosos con la empatía. En un estudio anterior se documentó que los perros domésticos tienden a experimentar bostezos contagiosos bajo observación en el laboratorio, pero no está claro si este fenómeno está enraizado en la historia evolutiva de los mamíferos, o si ha evolucionado en perros como resultado de la domesticación.
En un nuevo estudio, el equipo de Teresa Romero, de la Universidad de Tokio en Japón, ha investigado los bostezos contagiosos y su potencial conexión con la empatía en lobos. Romero y sus colegas observaron y registraron los bostezos de una sola manada de 12 lobos en el Parque Zoológico de Tama, en Tokio, Japón, durante cinco meses, en situaciones relajadas (sin signos visibles de tensión), y tomaron nota del momento exacto de cada bostezo, la identidad del que empezó a bostezar primero, y la identidad y posición de los individuos próximos a este último.
Los resultados sugieren que ciertamente los lobos pueden experimentar bostezos contagiosos. La fortaleza del vínculo social del miembro de la manada con respecto al lobo que bostezaba afectaba positivamente a la frecuencia de los bostezos contagiosos. Además, las lobas mostraban un tiempo de reacción más rápido que los machos cuando observaban bostezos de compañeros allegados, lo que sugiere que las hembras son más receptivas a los estímulos sociales de su entorno.
Según los autores, a pesar del pequeño tamaño de la muestra poblacional de lobos, estos resultados podrían proporcionar las pruebas preliminares de que los bostezos contagiosos pueden estar relacionados con la capacidad de los lobos para la empatía, y sugiere que los fundamentos de la empatía están presentes en una gama más amplia de especies de lo que se pensaba antes.

domingo, 31 de agosto de 2014

LOS PERROS PASTOR UTILIZAN DOS SENCILLAS REGLAS PARA MANEJAR A SUS REBAÑOS

agenciasinc.es

Un equipo internacional de investigadores ha descubierto que con dos simples reglas, recoger a las ovejas cuando están dispersas y llevarlas hacia adelante cuando están juntas, los perros pastor son capaces de reunir a grandes rebaños de ovejas. El estudio se publica hoy en el Journal of the Royal Society Interface.

Ovejas del estudio equipadas con mochilas GPS. / A. J. Morton.

Científicos de varios centros de investigación han utilizado tecnología GPS para entender cómo los perros pastores hacen su trabajo de forma tan eficaz. Hasta ahora no sabían cómo se las arreglaban para conseguir que un grupo grande de ovejas estuvieran dispuestas a moverse en la misma dirección.
Los miembros del equipo de la Universidad de Swansea (Reino Unido) incorporaron a un rebaño de ovejas y a un perro pastor mochilas que contenían dispositivos GPS de gran precisión, diseñados por compañeros del Royal Veterinary College de Londres.
En la Universidad de Uppsala (Suecia), otro grupo de investigadores del proyecto utilizó los datos de estos dispositivos –junto con simulaciones por ordenador–, para desarrollar un modelo matemático del pastoreo de los perros. La investigación se publica en el Journal of the Royal Society Interface.
Sus resultados indican que siguen solo dos simples reglas: recoger a las ovejas cuando están dispersas y llevarlas hacia adelante cuando están juntas.
"Si observas a los perros pastores que rodean a las ovejas, el animal teje una recorrido de ida y vuelta por detrás del rebaño", declara Andrew King.
coautor del trabajo e investigador de la Universidad de Swansea.  
De hecho, un único can pudo guiar a un rebaño de más de 100 individuos con estas dos sencillas reglas.
"Tuvimos que pensar –añade– en lo que el perro podía ver para desarrollar nuestro modelo. Básicamente ve blanco, figuras suaves frente a él. Si el perro ve fisuras entre las ovejas o dichos huecos son cada vez más grandes, el animal tiene que unirlos".
Según Daniel Strömbom de la Universidad de Uppsala: 'Algunos modelos indican que no son capaces de pastorear grupos realmente grandes. Cuando el número de individuos está por encima de 50 comienzan a necesitar varios pastores o perros pastores".
Este hallazgo podría derivar en el desarrollo de robots que recojan y guíen al ganado, técnicas de control de masas, o nuevos métodos para cuidar el medio ambiente.

Referencia bibliográfica:

Daniel Strömbom, Richard P. Mann, Alan M. Wilson, Stephen Hailes, A. Jennifer Morton, David J. T. Sumpter and Andrew J. King, “Solving the shepherding problem: heuristics for herding autonomous, interacting agents”, Journal of the Royal Society Interface.

PECES QUE ‘CAMINAN’ REVELAN CÓMO EVOLUCIONARON EN LA TIERRA LOS PRIMEROS TETRÁPODOS

noticiasdelaciencia.com

Hace unos 400 millones de años, un grupo de peces comenzó a explorar la superficie terrestre y se convirtieron en los primeros tetrápodos –animales vertebrados con cuatro extremidades como los actuales anfibios, reptiles, mamíferos y aves–. Sin embargo, cómo utilizaban sus cuerpos y sus aletas estos peces primitivos en un ambiente terrestre y qué procesos evolutivos estaban en juego, sigue siendo un misterio para los científicos.

Bichir de senegal (Polypterus senegalus). (Foto: SINC)


Ahora, investigadores de la Universidad McGill (Canadá) han publicado en la revista Nature un experimento con un pez africano denominado bichir de Senegal (Polypterus senegalus).
Los científicos seleccionaron un grupo de ejemplares juveniles de estos peces y los forzaron a vivir en condiciones similares a las terrestres durante ocho meses –en un tanque de aproximadamente tres milímetros de agua–. Los resultados indican que estos animales manifestaron cambios anatómicos y conductuales significativos, lo que ayuda a comprender qué podría haber sucedido cuando los primeros peces trataron de salir del agua.
"Queríamos utilizar este mecanismo para ver qué nuevas anatomías y comportamientos podíamos desencadenar, y si coinciden con lo que conocemos de los registros fósiles”, explica Emily Standen, que dirigió el proyecto en la Universidad McGill y actualmente trabaja en la Universidad de Ottawa (Canadá).
Los peces del experimento que se expusieron a condiciones parecidas a las terrestres aprendieron a caminar con mayor eficacia –colocando sus aletas cerca del cuerpo–, llevaban la cabeza más alta y se movían más rápido.
“Anatómicamente, su esqueleto pectoral se hizo más alargado, posiblemente para aumentar el apoyo al caminar, y disminuyeron el contacto con el cráneo para permitir potencialmente mayor movimiento de la cabeza y cuello", asegura Trina Du, coautora del estudio.
Este es el primer ejemplo que demuestra que la plasticidad pudo haber facilitado una transición evolutiva a gran escala, primero con un acceso a nuevas anatomías y comportamientos, y más tarde consolidándolos genéticamente por selección natural.
"Debido a que muchos de los cambios anatómicos reflejan el registro fósil, podemos formular la hipótesis de que esta alteración del comportamiento que vemos también revela lo que pudo haber ocurrido cuando los peces primitivos caminaron por primera vez con sus aletas en la tierra", concluye Hans Larsson, de la cátedra de investigación en macroevolución de la Universidad McGill y profesor asociado en el Museo Redpath (Montreal, Canadá). (Fuente: SINC)

jueves, 28 de agosto de 2014

DESCUBREN UNA NUEVA CAPACIDAD SENSORIAL EN MURCIÉLAGOS

noticiasdelaciencia.com

Los animales pueden usar diferentes modalidades sensoriales para orientarse, y algunas de ellas son muy diferentes a las nuestras. Por ejemplo, algunas especies de aves utilizan el patrón de polarización producido por la luz solar en la atmósfera para calibrar sus sistemas de orientación. Ahora, unos investigadores han descubierto que un mamífero de hábitos nocturnos, el murciélago de la especie Myotis myotis, tiene la capacidad de orientarse usando luz polarizada. Estos murciélagos se valen del patrón de polarización del cielo, al acercarse el ocaso,  para calibrar su sistema de orientación, que se basa en el campo magnético de la Tierra.

Un murciélago Myotis myotis en el momento de echar a volar. (Foto: © Instituto Max Planck para la Ornitología / Stefan Greif)

El equipo de Stefan Greif, del Instituto Max Planck para la Ornitología en Seewiesen, Alemania, capturó 70 hembras de los citados murciélagos en una cueva en el nordeste de Bulgaria. A la hora del crepúsculo, los científicos expusieron la mitad de los murciélagos, en receptáculos especiales, a una dirección de polarización desplazada en 90 grados respecto al espectro natural. La otra mitad del grupo fue colocada dentro de receptáculos similares pero con la dirección de polarización natural. Mucho después de caer la noche, los murciélagos fueron llevados a dos sitios diferentes, a unos 20 kilómetros de distancia de su hogar. En tales lugares fueron liberados, después de que los científicos les pusieran pequeños transmisores de radio con el propósito de seguirles la pista mientras volaban de regreso a la cueva. Los animales expuestos al patrón de polarización desplazado en 90 grados al anochecer se alejaron en una dirección desviada en unos 90 grados respecto a la dirección seguida por los del grupo sometido a la polarización natural.
Con este sencillo experimento, los investigadores han demostrado por vez primera que los murciélagos pueden utilizar el patrón de polarización del cielo al anochecer para calibrar su "brújula" interna. Sin embargo, el mecanismo exacto que lo permite todavía es desconocido. Se necesitan nuevos estudios fisiológicos y de comportamiento para conocer los entresijos de esta nueva y fascinante capacidad sensorial de los murciélagos.

UNA GRAN COLONIA DE ORGANISMOS EXTREMÓFILOS HABITA BAJO LA PENÍNSULA IBÉRICA

agenciasinc.es

Un estudio internacional liderado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha descubierto un gran ecosistema de organismos extremófilos a 150 metros de profundidad en la mina sevillana de Las Cruces.

Sin oxígeno, estas bacterias respiran gracias al sulfato presente en su entorno y han sido capaces de formar un yacimiento mineral inédito en el mundo. / Sinc

Una investigación, publicada en la revista Nature Communications y en la que participa el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, expone que la gran actividad microbiana que ha tenido lugar en los últimos 5 millones de años en la mina sevillana de Las Cruces ha sido capaz de formar un yacimiento mineral inédito en el mundo. 
Además, los autores creen que la biomasa subterránea de la Tierra podría ser mucho mayor de lo que se pensaba y que situaciones similares podrían estar sucediendo en Marte y en otros planetas.
“Hemos encontrado evidencias geológicas y geoquímicas de la existencia de un bioreactor gigante en el subsuelo de la Faja Pirítica Ibérica. Se trata de una colonia de organismos capaces de vivir en condiciones extremas. Se alimentan de restos de materia orgánica simple, como metano y otros hidrocarburos, y, ante la ausencia de oxígeno atmosférico, respiran gracias al sulfato presente en su entorno”, explica el investigador del CSIC Fernando Tornos, del Instituto de Astrobiología, centro mixto del CSIC y el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial.
Este tipo de alimentación y respiración provoca importantes cambios químicos en el hábitat donde viven dichas bacterias y ha dado lugar a la formación de varios millones de toneladas de rocas ricas en carbonatos, galena y minerales de hierro, plata y oro.
“Las Cruces es probablemente uno de los mejores y casi únicos ejemplos a escala mundial de cómo la vida modifica y modela una mineralización. Es un proceso reciente, que puede que siga ocurriendo ahora, y nos muestra lo importante que es laf unción de las bacterias en la química de los ambientes subterráneos. Puede que la vida primigenia en la Tierra se diera en escenarios similares y que lo mismo esté sucediendo en Marte y otros planetas”, añade el investigador del CSIC Antonio Delgado, del Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra.

Referencia bibliográfica:

Fernando Tornos, Francisco Velasco, César Menor‐Salván, Antonio Delgado, John F. Slack & Juan ManuelEscobar. Formation of recent Pb‐Ag‐Au mineralization by potential sub‐surface microbial activity.Nature Communications. DOI: 10.1038/ncomms5600.