domingo, 17 de junio de 2012

LOS SALTAMONTES “MUERTOS DE MIEDO” ALTERAN EL ECOSISTEMA

agenciasinc.es

La sensación de riesgo de las presas influye en la descomposición de sus cuerpos cuando fallecen. Un equipo internacional de científicos demuestra que el papel que desempeña el predador modifica los procesos de regeneración del suelo de la misma forma que lo hacen los materiales derivados de las plantas.


Un saltamontes escondiéndose detrás de unas cañas. Imagen: Dror Hawlena.

Los saltamontes (Melanoplus femurrubrum) tienen muchos enemigos en los prados de América del Norte: pájaros insectívoros, mantis religiosas y arañas. La percepción del peligro somete su organismo a cambios metabólicos y químicos que alterarían los procesos del ecosistema, según los resultados publicados en Science por un equipo de científicos estadounidenses y un israelí.
De forma general “el hallazgo permite predecir cómo los diferentes cambios de entorno alteran la fisiología de los animales y, por consiguiente pueden afectar al funcionamiento del ecosistema”, dice a SINC Dror Hawlena, científico de la Universidad de Yale (EE UU) y de la Universidad Hebrea de Jerusalén (Israel), y primer autor del estudio.
Las conclusiones contradicen la visión de que los materiales derivados de las plantas son el elemento más importante en la regulación de los procesos cíclicos de los nutrientes del suelo y, por lo tanto, en los procesos del ecosistema.
Según este trabajo, las alteraciones en los cambios fisiológicos de los saltamontes estresados modifica el proceso de descomposición de sus organismos una vez muertos.
El apetito de los microbios disminuye y, en consecuencia, “se ralentiza el proceso de convertir el carbono orgánico de los azúcares y proteínas del organismo fallecido a carbono inorgánico o minerales de los que se alimentan las plantas”, explica Hawlena.
El nuevo modelo teórico analiza la respuesta de estrés de la presa al riesgo de depredación en la cadena alimentaria y los procesos biológicos, geológicos y químicos del ecosistema.

Arañas ‘inofensivas’ asustan a los saltamontes

Para probarlo empíricamente, los investigadores reprodujeron el ecosistema natural de los saltamontes en cajas. Los científicos pegaron partes de la boca de las arañas, bajo un microscopio de disección, para evitar que se comieran a sus presas y conseguir el efecto de la percepción del riesgo.
Cuando los saltamontes fallecieron, los expertos los dejaron en descomposición durante 40 días antes de añadir material vegetal muerto. Gracias a una técnica láser de alta sensibilidad, midieron una parte fundamental del proceso de descomposición en el que intervienen las bacterias y así vieron cómo disminuyó el ritmo.
En estudios anteriores, Dror Hawlena ya había demostrado las consecuencias de la presión de depredación en el ecosistema. Uno de ellos, firmado junto con el español Valentín Pérez-Mellado de la Universidad de Salamanca, concluyó que una especie de lagartija (Acanthodactylus beershebensis) del desierto de Negev, en Oriente Próximo, cambiaba su dieta para evitar a los predadores. 

Referencia bibliográfica:

Hawlena, D.; Strickland, M.S.; Bradford, M.A.; Schmitz, O.J. “Fear of predation slows plant-litter decomposition”. Science (336): 1434-1438, 15 de junio de 2012. 

viernes, 15 de junio de 2012

SE PUBLICA EL PRIMER MAPA DE LOS MICROBIOS QUE HABITAN EL CUERPO SANO

agenciasinc.es

Esta semana, las revistas científicas Nature y PLoS publican un total de 16 artículos en los que se anuncian nuevos resultados del Proyecto Microbioma Humano: el mapa de la diversidad microbiana de 18 partes del organismo sano, que incluye más de 10.000 especies. El estudio de los microorganismos que habitan en nuestro interior está cambiando el concepto médico y biológico del cuerpo humano y de la enfermedad.


Escherichia coli, bacteria que se encuentra en el intestino de muchos animales. Imagen: Wikipedia

“Nuestra vida y nuestra individualidad se la debemos a los microbios que viven en nosotros y este descubrimiento cambiará radicalmente la práctica de la medicina”, expone David A. Relman, de la Universidad de Stanford, en un editorial de la revista Nature. Esta semana, dos de las principales publicaciones científicas, Nature y PLoS, dedican buena parte de sus páginas a los microorganismos que nos habitan. La razón es que se han obtenido nuevos resultados del Proyecto Microbioma Humano.
Por primera vez, después de cinco años de investigación, el consorcio científico ha mapeado comunidades completas de microbios que habitan varias partes del organismo sano. Según los cálculos de los investigadores, se han identificado más de 10.000 especies, entre el 81% y el 99% de todos los géneros de microorganismos en adultos sanos.
Las primeros indicios de la microbiota que vivía en el cuerpo humano se publicaron hace unos 300 años, poco después de la invención del microscopio. Hoy en día, gracias a la mejora de las técnicas de secuenciación de ADN el objetivo es descifrar el ‘segundo genoma humano’ el del microbioma. 
El proyecto Genoma Humano secuenció en el año 2000 la información genética contenida en el 10% de las células que forman nuestro cuerpo. El 90% restante no son células propias sino millones de microorganismos que reciben el nombre de microbioma. 
A finales de 2007 el Instituto de Nacional de Salud de los Estados Unidos (NIH) se embarcó en el Proyecto Microbioma Humano (HMP) y en 2008 la Comisión Europea y China crearon su homólogo, MetaHIT (Metagenomics of the human intestinal tract).
Con los primeros resultados de la iniciativa HMP, se publican dos artículos en Nature y en varias revistas de PLoS, 14 trabajos. Los datos obtenidos son de libre acceso para los investigadores de todo el mundo y para Relman representan “una lección de humildad”.

Cada lugar del cuerpo tiene su propia ‘firma’ de microorganismos

La materia prima de los investigadores ha sido el material genético de 11.174 muestras de microorganismos obtenidos de 242 individuos sanos estadounidenses de 18 a 40 años (129 hombres y 113 mujeres) de varias partes de su cuerpo –15 en hombres y 18 en las mujeres–, durante 22 meses. 
Los dos estudios publicados en Nature han sido liderados por Curtis Huttenhower, del Instituto de Salud Pública de Boston y del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) y Bárbara A. Methé, del Instituto Craig Venter (EE UU). Estos trabajos han identificado la mayoría de microbios y genes presentes en los 242 individuos.
Huttenhower y sus colegas han descubierto que cada lugar del cuerpo humano tiene su propia ‘firma’ de microorganismos y que la diversidad taxonómica y genética es mayor en las muestras de dientes y heces, intermedia en piel y en la superficie interna de la mejilla, y baja en las muestras vaginales.
El equipo de Methé ha comprobado que el proyecto HMP y MetaHIT han identificado muchas especies distintas de microorganismos. Este resultado pone en duda si la muestra de personas incluida en ambas iniciativas es suficientemente representativa. En ambos estudios se han incluido individuos sanos de países económicamente desarrollados.
“Hemos de reconsiderar el concepto de ‘sano’ –opina Relman–. En estos estudios se ha excluido toda enfermedad intestinal, pero en países en vías de desarrollo esta patología es prácticamente ‘normal”. Además, la prevalencia de sobrepeso y obesidad aumenta progresivamente en los países enriquecidos.
“¿Qué factores hacen que el microbioma cambie entre personas o a lo largo del tiempo?. ¿Cómo responden los microorganismos a las alteraciones del cuerpo humano? ¿Podemos predecir y restaurar las poblaciones de microbios?”, estas son solo algunas de las preguntas que lanza Relman a la luz de los nuevos datos. “Estos estudios son solo el principio”, concluye el experto.

Referencias bibliográficas

The Human Microbiome Project Consortium. “Structure, function and diversity of the healthy human microbiome” Nature 486: 208-214. Junio de 2012. DOI: 10.1038/nature11234

The Human Microbiome Project Consortium. “A framework for human microbiome Research” Nature 486: 216-221. Junio de 2012. DOI: 10.1038/nature11209

Relman D.A. “Learning about who we are”. Nature 486: 194-195. Junio de 2012

martes, 12 de junio de 2012

MÁS LOGROS DEL CHIMPANCÉ QUE IDEA TÁCTICAS DE COMBATE HUMANAS

noticiasdelaciencia.com

Es inevitable pensar en las películas de la saga de "El Planeta de los Simios" cuando se analiza el extraño caso de un chimpancé que desde 2009 tiene desconcertados a los científicos debido a su capacidad de trazar planes con premeditación e ingenio, encaminados a atacar a los humanos. Las capacidades intelectuales mostradas por este simio se consideraban, hasta ahora, exclusivas de la especie humana.


El chimpancé Santino. Se diría que en su mirada se percibe la chispa de su inteligencia superior. (Foto: Mathias Osvath / Universidad de Lund)

El chimpancé Santino alcanzó fama internacional en 2009 por su hábito de recolectar piedras y otros materiales para improvisar con ellos proyectiles a arrojar por sorpresa contra algunos visitantes del zoológico sueco en el que vive. Su conducta fue descrita como ejemplo de planificación espontánea de un evento futuro, siendo su estado psicológico al planificar la acción claramente muy distinto al de sus demostraciones de agresividad posteriores. Dicho de otro modo, Santino planeaba sus ataques a sangre fría, como un estratega preparando su entorno ante la posible llegada futura de un enemigo.
Un nuevo estudio muestra que la creatividad de Santino cuando planea sus ataques con piedras es superior a la que habían observado los investigadores inicialmente. No sólo recolecta piedras y prepara proyectiles con mucha antelación a su uso, sino que también encuentra nuevas formas de engañar a los visitantes.
El nuevo estudio, realizado por el equipo de Mathias Osvath y Elin Karvonen, de la Universidad de Lund en Suecia, analizó la capacidad del chimpancé para trazar y llevar a cabo planes complejos.
La conducta del chimpancé Santino es de particular interés porque se manifiesta cuando éste aún no ha avistado a las personas a las que pretende engañar. Esto significa que Santino puede trazar planes sin tener una realimentación inmediata de percepción de su objetivo (los visitantes del zoo) que le ayude en su reto de intentar adelantarse a los acontecimientos futuros.
En este nuevo estudio, se ha profundizado en la insólita conducta de este chimpancé que usa tácticas humanas de ataque, y se ha comprobado que además ha aprendido a esconder sus armas, tanto en sitios ya existentes (por ejemplo cavidades en troncos) como en escondrijos preparados por él con esa finalidad (por ejemplo bajo puñados de heno colocados por él), en ambos casos ubicados cerca del área de los visitantes. La estrategia le permite a Santino reaccionar de forma rápida y contundente ante las personas que por algún motivo cree que se merecen una pedrada, sin darles tiempo a apartarse.
La primera vez que Santino recurrió a tapar con paja un objeto utilizable como proyectil fue después de varias ocasiones en las que el guía del zoo hizo retroceder a la gente al intentar el chimpancé lanzar sus proyectiles desde posiciones menos ventajosas. Todas estas operaciones de emplazamiento de proyectiles en sitios estratégicos y su ocultación las realizaba cuando no había visitantes a la vista, y usaba los proyectiles escondidos cuando regresaban los visitantes. Para ocultar los proyectiles con heno, el chimpancé lo traía desde el recinto interior.
Durante la temporada en que el equipo de investigación espió la conducta de Santino, se observó que esconder proyectiles en puntos estratégicos se convirtió en la táctica preferida del chimpancé. Santino incluso combinaba habitualmente dos estrategias de engaño: esconder los proyectiles e inhibir las demostraciones de enfado que normalmente precederían a sus ataques. Dicho de otro modo, ocultaba deliberadamente su enojo para que nadie sospechase lo que estaba a punto de hacer.
La llamativa conducta de este simio sugiere la existencia de una capacidad de planificación flexible que, en los seres humanos, se basa en la recombinación creativa de recuerdos, representada mentalmente en un escenario futuro asociado al "qué pasaría si".
Si Santino actúa movido por un odio firme, o en su conducta hay algo de gamberrismo, no está claro. Lo cierto es que, por lo demás, no destaca como individuo agresivo, ya que incluso juega con una cría de chimpancé a la que parece tenerle mucho afecto.
Tal vez Santino hace tan sólo lo que muchos humanos haríamos en su situación: Ser afectuoso con los nuestros, pero desconfiado y hostil con los desconocidos.

ASÍ SON LOS HÁBITATS MÁS AMENAZADOS Y DESCONOCIDOS DE LOS MARES ESPAÑOLES

agenciasinc.es

El proyecto LIFE+ INDEMARES ha permitido filmar por primera vez algunos de los ecosistemas más singulares y desconocidos de las aguas españolas. Con motivo del Día Mundial de los Océanos, el Instituto Español de Oceanografía (IEO) muestra las imágenes de las últimas campañas realizadas en los volcanes de fango del golfo de Cádiz y el conjunto de cañones de Avilés.


Hábitats amenazados estudiados por el IEO

Tras años de investigaciones, el robot submarino Liropus 2000 del Instituto Español de Oceanografía (IEO) ha permitido observar de manera directa las comunidades asociadas a las emanaciones de metano de los volcanes de fango en el golfo de Cádiz, y los arrecifes de corales de aguas frías del cañón de Avilés, que se encuentran entre 400 y más de 1.000 metros bajo el agua.
En el marco del proyecto LIFE + INDEMARES y a bordo del buque oceanográfico Ramón Margalef, investigadores del Centro Oceanográfico de Málaga del IEO constataron en el golfo de Cádiz la presencia de un elevado número de focos de emisión de fluidos, superior al que se había registrado hasta ahora. Además, encontraron cerca de 1.000 especies, algunas nuevas para la ciencia.
Este ecosistema en los volcanes de fango es posible gracias a unas bacterias que convierten el gas metano en piedra (carbonato cálcico). Para los científicos, lo que era un fondo fangoso con una diversidad escasa se transforma en un sustrato rocoso donde crecen corales, gorgonias, y esponjas, entre otros organismos.
En el Cantábrico, el robot submarino Liropus 2000 filmó por primera vez los ecosistemas más inaccesibles del conjunto de cañones de Avilés. Entre ellos, el arrecife de coral del cañón de La Gaviera, situado a más de 800 metros de profundidad.
Durante la campaña, se recuperó también una plataforma científica que se fondeó en el cañón durante un año para estudiar los procesos físicos que permiten el asentamiento de corales de aguas profundas.

Una desprotegida biodiversidad marina

España es uno de los países europeos más ricos en términos de biodiversidad marina. Unos 8.000 km de costa acogen alrededor de 23 millones de personas, es decir al 58% de la población total española. Sin embargo, según el IEO, el aumento de la presión de las actividades humanas en el medio marino está mermando la salud de los océanos y la disponibilidad de los recursos naturales que albergan.
A pesar de que casi una cuarta parte del territorio terrestre forma ya parte de la Red Natura 2000 –como garantía de protección–, en el ámbito marino, la Red Natura se encuentra en un estado de desarrollo “embrionario”. Los altos costes y la complejidad de los inventarios en zonas alejadas de la costa y a grandes profundidades dificultan la disponibilidad de la información científica sobre hábitats y especies que permitirían identificar los espacios a incluir en la Red.
El proyecto LIFE+ INDEMARES “Inventario y designación de la Red Natura 2000 en áreas marinas del Estado español” surge con el objetivo de contribuir a la protección y uso sostenible de la biodiversidad en los mares españoles mediante la identificación de espacios de valor para la Red Natura 2000.


jueves, 7 de junio de 2012

LAS FEROMONAS AYUDAN A LOS GALÁPAGOS A ENCONTRAR LA PAREJA IDEAL

agenciasinc.es

El galápago leproso (Mauremys leprosa) utiliza señales químicas para buscar pareja y evitar la competencia con otros machos. Investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) demuestran cómo los galápagos liberan señales químicas en el agua que informan a otros individuos de su especie sobre su tamaño y estado de salud.


Galápago leproso (Mauremys leprosa). Imagen: José Martín Rueda.

Las feromonas son sustancias químicas implicadas en la comunicación entre miembros de la misma especie. Estas sustancias no sólo proporcionan información sobre la presencia de otros individuos, sino también sobre aspectos como los rasgos morfológicos y el estado de salud del portador. En los reptiles, las feromonas son importantes en la toma de decisiones reproductivas y en muchos procesos de selección sexual.
Aunque existen muchos estudios sobre la comunicación química en diferentes especies de lagartos y culebras, no se sabe bien cómo funcionan las señales químicas en las tortugas, a pesar de que éstas poseen un sistema vomeronasal muy desarrollado. Este órgano consta de diferentes estructuras que envían señales químicas (incluidas las feromonas) al sistema nervioso central, lo que permite que los animales sean capaces de discriminar entre distintos olores, ya sean de presas, depredadores o miembros de su misma especie, utilizando únicamente sustancias químicas.
Un equipo de científicos del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) ha estudiado el papel que desempeñan las señales químicas en la comunicación del galápago leproso (Mauremys leprosa) durante la estación reproductora. Para ello, han analizado las respuestas comportamentales a las señales emitidas por otros miembros de su especie de diferente tamaño y estado de salud. Sus resultados han sido publicados en la revista Animal Behaviour. 
"Los galápagos leprosos son capaces de reconocer ciertos rasgos individuales en otros miembros de su especie utilizando únicamente señales químicas", apunta Alex Ibáñez, del MNCN. "Además, hemos observado que las tortugas pueden modificar su comportamiento y el uso del espacio -como puede ser el cambiar de charca- en respuesta a esos estímulos químicos", añade Ibáñez.

Evitar aguas con machos grandes

Las señales químicas que emiten los machos trasladan información sobre su tamaño a otros individuos. De este modo, los galápagos macho evitan las aguas con olores de machos más grandes -que son dominantes-. Mientras, prefieren aquellas ocupadas por machos de menor tamaño.
Asimismo, los machos seleccionan aquellas aguas con señales químicas de hembras con mejor respuesta inmune -las más sanas- del mismo modo que ellas eligen las charcas en las que encuentran indicios de la presencia de machos más grandes.
Según los autores, esta discriminación químiosensorial que realizan los galápagos les facilita la selección de charcas en las que el riesgo de interacciones agresivas con otros machos es mínima. Por otra parte, la preferencia por aguas ocupadas por parejas más atractivas -más fuertes o más saludables- podría incrementar las oportunidades de apareamiento y con ello, aumentaría su aptitud reproductiva.

Referencia bibliográfica:

Ibáñez, A., López, P., Martín, J. (2012). "Discrimination of conspecifics' chemicals may allow Spanish terrapins to find better partners and avoid competitors". Animal Behaviour, 83(4): 1107-1113.

lunes, 4 de junio de 2012

LAS HORMIGAS INSPIRAN UN BUSCADOR PARA REDES SOCIALES

agenciasinc.es

Investigadores de la la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) han desarrollado un algoritmo para acelerar las búsquedas de caminos entre dos nodos dentro de una red social. El algoritmo se basa en el comportamiento que siguen las hormigas mientras buscan comida.


Buscador en redes sociales basado en el comportamiento de las hormigas

Una de las principales cuestiones técnicas en el ámbito de las redes sociales, cuyo uso cada vez está más generalizado, consiste en localizar la cadena de referencia que lleva de una persona a otra, de un nodo a otro. El mayor reto que se plantea en este ámbito es el enorme tamaño de estas redes y que la respuesta debe ser rápida, dado que el usuario final espera resultados en el menor tiempo posible. 
Para solucionar este problema, investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) han desarrollado el algoritmo SoSACO, que acelera la búsqueda de caminos entre dos nodos pertenecientes al grafo que representa a una red social.
El funcionamiento de SoSACO se inspira en el comportamiento que ha perfeccionado a lo largo de miles de años uno de los insectos más disciplinados del planeta a la hora de buscar comida, las hormigas. En general, los algoritmos de las colonias imitan cómo estos insectos son capaces de encontrar el camino entre el hormiguero y la fuente de alimento mediante la deposición y seguimiento de un rastro químico depositado en el suelo, denominado feromona.
“En este estudio –explican sus autores– se incorporan además otros rastros olorosos para que las hormigas puedan seguir tanto la feromona como el aroma de la comida, con lo que consiguen encontrar la fuente de alimento de forma mucho más rápida”. Los principales resultados de esta investigación, realizada por Jessica Rivero en el marco de su tesis doctoral en el Laboratorio de Bases de Datos Avanzadas (LABDA) de la UC3M, se resumen en un artículo científico publicado en la revista Applied Intelligence.
“Los primeros resultados muestran que la aplicación del algoritmo a redes sociales reales consigue obtener una respuesta óptima en muy poco tiempo (decenas de milisegundos)”, indica Jessica Rivero.

Múltiples aplicaciones

Gracias a este nuevo algoritmo de búsqueda, el sistema puede encontrar estos caminos más fácilmente y sin necesidad de modificar la estructura de un grafo (una imagen que representa mediante nodos y enlaces las relaciones entre un conjunto de elementos). “Este avance permite resolver gran cantidad de problemas que encontramos en el mundo real, ya que los escenarios sobre los que ocurren se pueden modelar mediante un grafo”, explican los investigadores.
De esta manera, podría encontrar aplicación en muchos escenarios, como para mejorar la localización de la ruta en los sistemas GPS o los juegos on line, para la planificación del reparto de los camiones de mercancías, para saber si dos palabras guardan algún tipo de relación o simplemente para conocer con más exactitud las afinidades que tengan en común dos usuarios de Facebook o Twitter, por ejemplo.
Esta investigación, que ha contado con el apoyo de la Comunidad de Madrid y el Ministerio de Educación y Ciencia, surgió dentro del proyecto SOPAT ante la necesidad  de guiar a los clientes de un hotel empleando un sistema de interacción natural. Esta tesis, titulada Búsqueda Rápida de Caminos en Grafos de Alta Cardinalidad Estáticos y Dinámicos, ha sido dirigida por los profesores de LABDA del Departamento de Informática Fco. Javier Calle y Mª Dolores Cuadra.

Referencia bibliográfica:

Rivero, J (Rivero, Jessica); Cuadra, D (Cuadra, Dolores); Calle, J (Calle, Javier); Isasi, P (Isasi, Pedro). "Using the ACO algorithm for path searches in social networks". APPLIED INTELLIGENCE 36 (4): 899-917, junio de 2012.  ISSN: 0924-669X

sábado, 2 de junio de 2012

¿POR QUÉ LAS PLANTAS SIGUEN AL SOL?

ecoticias.com

El interrogante de por qué algunas plantas se inclinan hacia la luz o crecen hacia arriba y no hacia abajo puede parecer sencillo


Ahora un equipo de investigadores europeos ha realizado descubrimientos que nos acercan a solucionar este enigma. En su opinión, la respuesta radica en la auxina, una clase de hormona vegetal. Los descubrimientos de su estudio se han publicado en la revista Nature.
El interrogante de por qué algunas plantas se inclinan hacia la luz o crecen hacia arriba y no hacia abajo puede parecer sencillo, pero la respuesta dista de serlo. Hace mucho que diversos investigadores habían formulado la teoría de que la responsable de este fenómeno debía ser la auxina, que suscitó el interés incluso de Charles Darwin en el siglo XIX. No obstante, hasta ahora no se había logrado comprender al detalle su funcionamiento.
Una investigación realizada por científicos del Departamento de Biología de Sistemas Vegetales del Instituto de Biotecnología de Flandes (VIB) y de la Universidad de Gante (ambos en Bélgica) ha sacado a relucir una conexión nueva e importante entre esta cuestión y el transporte de la auxina por la planta. Según sus indagaciones, la auxina se almacena en sitios específicos.
El equipo, dirigido por Elke Barbez y supervisado por Jürgen Kleine-Vehn del VIB y Jiri Friml, también del VIB y de la Universidad de Gante, determinó que el transporte de la auxina por la planta desempeña una función compleja pero vital. La auxina se produce en las secciones en crecimiento de la planta y posteriormente se envía a otras partes de la misma donde es necesaria, incluido el tallo. Para que la planta pueda absorber de forma óptima y eficaz los rayos solares, es preciso que el tallo se enderece lo antes posible. Por esta razón se suministra más auxina a la sección inferior del tallo que a la superior, gracias a lo cual la primera crece más rápido y el tallo crece recto. Al regular el destino de la auxina transportada, las plantas logran aprovechar del mejor modo posible las condiciones cambiantes de su entorno.
Según los autores, sus hallazgos tendrán consecuencias de gran calado y podrían resultar beneficiosos para ingenieros agrónomos y agricultores. Es previsible que un conocimiento más preciso sobre la auxina proporcione nuevas herramientas para conseguir que los cultivos crezcan de un modo más eficiente. Así aducen, por ejemplo, que incrementando la concentración de auxina en el momento y el lugar adecuado se podría promover un crecimiento más positivo y una mayor productividad.
Además de contar con el apoyo de la VIB y de la Universidad de Gante, esta investigación recibió financiación del Fondo de Viena para la Ciencia y la Tecnología (WWTF, Austria), la Agencia para la Innovación mediante Ciencia y Tecnología (IWT, Bélgica), el programa Odysseus de la Fundación para la Investigación de Flandes (Bélgica), los Fondos Nacionales Suizos, y el Ministerio de Educación, Juventud y Deporte de la República Checa.